jueves, 13 de noviembre de 2014

HUMANISMOS ATEOS DEL SIGLO XX

EL HUMANISMO MATERIALISTA

EL HUMANISMO MATERIALISTA 

FEUERBACH: “Dios es una ilusión”
Para Feuerbach, mientras el hombre necesite de algo absoluto, persistirá la alienación. Por ejemplo, si el hombre necesita de Dios para afirmarse a sí mismo, algo suyo se pierde, esto es, el hombre queda alienado. Hay que afirmar más bien que, para el hombre, el ser supremo no es Dios, sino, el mismo hombre. Feuerbach critica al cristianismo, y a todas las religiones. Para él, “lo humano es lo divino” y la nueva religión será la política Afirma que una vez que el hombre ha llegado a la plenitud de su conciencia, tiene que deshacerse de la ilusión de ese Dios exterior, recuperar cuanto ha perdido y formar el “Reino del hombre”. Una vez que el hombre ha negado al Dios exterior y se ha endiosado a sí mismo, busca un sucedáneo, pero le parece que el hombre concreto e individual es algo ridículo para una idea tan grande, y entonces recurre a la comunidad. El amor de Dios queda suplantado por el amor y la comunión de los individuos; esta comunión o comunidad es necesaria para que el individuo tome conciencia de su individualidad.  

MARX: “La religión aliena al hombre” 
Marx critica la religión, en todos sus aspectos, como una fuente de alienación.

Critica a la iglesia en cuanto institución histórica, cuya práctica a través de los siglos no ha sido en modo alguno, salvo en el cristianismo inicial, liberadora.

Critica al cristianismo, al que considera como una justificación ideológica de la burguesía, cuyo poder ilegitimo, en el pasado de la aristocracia.

Critica, en general, a la religión mágica como una super estructura ideológica que interpreta la realidad y que, en cierto modo, tiende a objetivarla. Como el mito es falso, la objetivación que de él se derive también lo será. En el caso concreto de los mitos, el marxismo supone expresamente la idea de un Dios paternalista, exterior al hombre y trascendente al mismo, la idea de un cielo o un infierno eterno y, en general, toda una serie de ideas que ejercen influencia negativa en el quehacer de las personas.

el ateísmo

EL ATEÍSMO

El ateísmo es el rechazo a la creencia en la existencia de uno o más dioses. En sentido estricto, es la postura en la que no existe ningún dios. Por extensión, es la ausencia de creencia en que exista algún dios. Se opone al ateísmo, que en su forma más general afirma la existencia de al menos una deidad.
El término ateo etimológicamente deriva del latín athĕus y este del griego ἄθεος, que significa ‘sin dios(es)’, y fue empleado de forma peyorativa para referirse a quienes rechazaban a los dioses adorados por su sociedad. Con el surgimiento y la difusión del libre pensamiento, el escepticismo científico y el subsecuente incremento de la crítica de la religión, disminuyó el alcance del término. Las primeras personas en identificarse a sí mismas con la palabra «ateo» vivieron en el siglo XVIII. Algunas religiones antiguas y modernas son denominadas ateas, ya que o no tienen el concepto de deidad o niegan la existencia de una deidad creadora, aunque aún veneran a otras entidades divinas.
Los argumentos a favor del ateísmo abarcan desde aspectos filosóficos a perspectivas sociales e históricas. Las razones para no creer en ninguna deidad sobrenatural incluyen la falta de evidencia empírica, el problema del mal, el argumento de las revelaciones inconsistentes, el rechazo a conceptos infalsificables y el argumento de la no creencia, entre otros. Si bien algunos ateos han adoptado filosofías seculares, no existe una ideología o un sistema moral único a la que todos los ateos adhieran. Muchos de ellos sostienen que el ateísmo es una cosmovisión más parsimoniosa que el ateísmo y que por tanto la carga de la prueba no recae en quien no cree en la existencia de dioses, sino que es el creyente quien debe justificar su ateísmo.

EL ATEÍSMO MATERIALISTA
afirma que existe sólo la materia; el principal exponente de este ateísmo es la doctrina marxista, que busca “la liberación del hombre a partir, principalmente, de su emancipación económica y social”.

EL ATEÍSMO EXISTENCIALISTA 

El término hace referencia a la exclusión de cualquier creencia transcendental, metafísica o religiosa desde un pensamiento filosófico existencialista. El existencialismo ateo no puede nunca compartir elementos (p.ej.: la angustia o la rebelión a la luz de la finitud humana y las limitaciones) con el existencialismo religioso ni otros existencialismos metafísicos (p.ej.: con la Fenomenología y los trabajos de Heidegger).
El existencialismo ateo confronta la ansiedad por la muerte (Terror management theory) sin apelar a la esperanza de ser alguien salvado por Dios (ni otras salvaciones metafísicas como la reencarnación). Para algunos pensadores, el malestar existencial es sobre todo teórico (como lo es con Jean-Paul Sartre), mientras para otros filósofos se ven muy afectados por la angustia existencial (ejemplo de ello es Albert Camus y su discusión de lo absurdo).
Según Sartre la existencia precede a la esencia, lo que significa que, primeramente existe el ser humano (ej.: aparece en escena) y solo después se define a sí mismo.
Si el hombre, tal y como el existencialismo lo concibe, es indefinible, es porque al principio no es nada. Solo después será algo, y él mismo habrá hecho lo que será. No existe la naturaleza humana, ya que no hay un dios que la conciba. No solamente el hombre es lo que se concibe a sí mismo ser, si no que también es únicamente lo que quiere ser después de este impulso hacia la existencia.


la religion


LA ESENCIA DE LA RELIGION

la esencia de la religión 

Feuerbach dice que la idea de que la naturaleza y el universo tengan un origen real, y que haya habido un tiempo en el que no existieran ni naturaleza, ni mundo, ni universo, ni nada, es una idea mezquina que sólo le parece evidente al hombre con ideas mezquinas y limitadas del mundo. Según Feuerbach es una imaginación absurda la de que alguna vez no haya existido nada porque el prototipo de toda existencia es la naturaleza. Todos los atributos que se le dan a Dios le convierten en un ente objetivo y real, que son propiedades de la naturaleza que se suprimen si se suprime la naturaleza. Por lo que si prescindes de la naturaleza borras todas las imágenes de todos los objetos naturales.
Si la representas de manera no sensible se te aparece una esencia cuyas propiedades son: infinidad, poder, unicidad, necesidad y eternidad, pero esta esencia queda después de haberle sustraido a la naturaleza todas esas cualidades y fenómenos que los sentidos pueden registrar, esa esencia es la naturaleza de manera abstracta, en el pensamiento.
Así la derivación de la naturaleza desde Dios es la derivación de la esencia sensible y real de la naturaleza abstracta, que únicamente existe en el pensamiento.



el origen religioso en el hombre

EL HOMBRE PRIMITIVO

Aquellos llamados hombre primitivo eran los extraños hombres que ambulaban 
por el mundo antes de que se inventara la escritura y pudiesen legarnos 
pruebas de su modo de vivir.

Su Historia:
Hace alrededor de 50,000 años, el hombre ya conocía el fuego, y sabia que 
era su mejor amigo y debía conservarlo. El hombre vivía en cavernas y se 
cubría con pieles de animales. Se desayunaban con algunas larvas e insectos, 
pero también comían nueces, fresas y huevos de aves salvajes.

Los niños se dedicaban a buscar leña, algunas mujeres recogían raíces y 
frutos de plantas silvestres. Otras mujeres preferían quedarse a la par de 
la fogata y trabajar con las pieles de los animales cazados por los hombres. 
Unos pocos hombres permanecían junto al fuego trabajando trozos de pedernal, 
dándoles lentamente forma de raspadores, hachas, clavos y otras 
herramientas.

La ocupación principal de los hombre era la caza. Si se atrevían podían 
cazar hasta mamuts, bisontes, renos, y caballos salvajes, pero como para 
matar a su presa solo disponían de garrotes y lanzas de madera, generalmente 
tenían que contentarse con piezas menores.

Solían comer en el mismo lugar donde cazaban al animal, pero aveces llevaban 
lo que podían al campamento. Esta gente del campamento comía cruda la carne 
y los huesos. Los huesos los quebraban alrededor del fuego y sorbían la 
médula, Luego las mujeres machacaban los huesos con la ayuda de martillos de 
madera y de piedra hasta convertirlos en una pasta que también les servia de 
alimento.


EL TABÚ

La palabra tabú designa a una conducta moralmente inaceptable por una sociedad, grupo humano o religión. Es la prohibición de algo supuesta mente extraño (en algunas sociedades) , de contenido religioso, económico, político, social o cultural por una razón no justificada basada en prejuicios infundados. Romper un tabú es considerado como una falta imperdonable por la sociedad que lo impone. Algunos tabúes son, en efecto, delitos castigados por la ley, en este sentido, los tabúes son antecedentes directos del derecho. Hay tabúes fuertemente incorporados a las tradiciones de ciertas culturas, mientras otros responden a intereses políticos.

LA MAGIA

La magia es el arte o ciencia oculta con que se pretende producir, valiéndose de ciertos actos o palabras, o con la intervención de seres imaginables, resultados contrarios a las leyes naturales.

EL RITO RELIGIOSO
Los mitos forman parte del sistema de creencias de una cultura o de una comunidad, la cual los considera historias verdaderas. Al conjunto de los mitos de una cultura se le denomina mitología. Cuanto mayor número de mitos y mayor complejidad tiene una mitología, mayor es el desarrollo de las creencias de una comunidad. La mitología sustenta la cosmovisión de un pueblo.

la religion

la religión


La religión es una actividad humana que suele abarcar creencias y prácticas sobre cuestiones de tipo existencial, moral y sobrenatural. Hay religiones que están organizadas de formas más o menos precisas, mientras que otras carecen de estructura formal; unas y otras pueden estar más o menos integradas en las tradiciones.
Definir qué es religión (del latín religare o re-legere) ha sido y es motivo de controversia entre los especialistas. Según el sociólogo G. Lenski, es «un sistema compartido de creencias y prácticas asociadas, que se articulan en torno a la naturaleza de las fuerzas que configuran el destino de los seres humanos. Por su parte, el antropólogo Clifford Geertz propone una definición alternativa: La religión es un sistema de símbolos que obra para establecer vigorosos, penetrantes y duraderos estados anímicos y motivaciones en los hombres, formulando concepciones de un orden general de existencia y revistiendo estas concepciones con una aureola de efectividad tal que los estados anímicos y motivaciones parezcan de un realismo único. Debido al amplio espectro de usos de la palabra, resulta especialmente complejo ofrecer una definición exhaustiva de la religión o del fenómeno religioso. Sin embargo se puede afirmar que como hecho antropológico engloba, entre otros, los siguientes elementos: tradiciones, culturas ancestrales, instituciones, escrituras, historia, mitología, fe y credos, experiencias místicas, ritos, liturgias, oraciones, etc.
La palabra religión en ocasiones se usa como sinónimo de religión organizada u organización religiosa, es decir, instituciones que respaldan el ejercicio o la actividad de ciertas creencias y ceremonias, frecuentemente bajo la forma de entidades legales.
Diversas ciencias humanas se han interesado por el fenómeno religioso desde sus respectivos puntos de vista como por ejemplo la antropología, la sociología, la psicología y la historia de las religiones. Por otro lado, disciplinas como la fenomenología de la religión estudian específicamente sus manifestaciones intentando dar con una definición exhaustiva del fenómeno y mostrar su relación con la índole propia del ser humano.
Filosóficamente, la religión puede ser un estilo de vida, un camino hacia la plenitud, una plenitud que inicia desde el mismo instante que se cobra conciencia de la misma.
En un sentido más amplio, también se utiliza para referirse a una obligación de conciencia que impele al cumplimiento de un deber.

la experiencia religiosa


LA EXPERIENCIA RELIGIOSA

El hombre, desde siempre, ha buscado algo que fuera verdadero, fuera del tiempo y del espacio, más allá de sus problemas, más allá de la vida; y a esa necesidad la ha llamado Dios; y aún sin haberlo experimentado, la mayor parte de los seres humanos cree en algo más allá de todo.
Las religiones prometen que si uno cree en ellas, en sus profetas, dogmas y rituales; y si observamos ciertas pautas de comportamiento moral, podremos encontrarnos con ese ser. Y en cierta forma parece ser cierto, porque los que lo han experimentado en forma directa lo lograron siguiendo las condiciones, las creencias y las influencias culturales.
Sin embargo, las religiones también han dividido a los hombres, han producido guerras y no parecen responder a todos los problemas.
Krishnamurti agrega que si queremos indagar sobre la existencia de algo como la experiencia religiosa, en primer lugar hay que hacerlo con honestidad, o sea sin ajustarse a principio alguno, ni a una creencia, y ver las cosas como son, sin distorsión alguna, porque el anhelo puede provocar ilusiones.

Krishnamurti agrega que si queremos indagar sobre la existencia de algo como la experiencia religiosa, en primer lugar hay que hacerlo con honestidad, o sea sin ajustarse a principio alguno, ni a una creencia, y ver las cosas como son, sin distorsión alguna, porque el anhelo puede provocar ilusiones.
Debemos tratar de descubrir si es que existe alguna clase de experiencia espiritual, trascendente o religiosa y también en qué consiste tal experiencia.
Uno tiene que ser capaz de reconocerla, porque se trata de una experiencia diferente de cualquier otra que hemos experimentado antes.
Esa demanda de experiencias extraordinarias, más profundas y fundamentales, sólo lleva a hacer más largo el camino de lo conocido.
La búsqueda de lo verdadero, por otro lado, incluye a un buscador, para quien lo verdadero puede estar condicionado por su conocimiento previo y por su experiencia pasada; por lo que esa búsqueda se puede convertir en una proyección magnificada de los propios deseos.
Lo más importante de esta búsqueda es saber si la mente puede estar libre de todo condicionamiento, averiguar si puede existir un estado fuera del tiempo, y no tener ningún compromiso con institución espiritual alguna.
Esta búsqueda exige gran honestidad, humildad y soledad, en el sentido de tener una mente que no dependa psicológicamente de otros. De esta manera se puede descubrir qué significa la disciplina.
Disciplina significa aprender por qué reprimimos, por qué controlamos, por qué tememos, por qué nos comparamos con otros, por qué nos ajustamos a los demás; ya que la consecuencia de todo eso es el conflicto.
Esta disciplina, este aprender, produce orden, un orden que no responde a ningún modelo o esquema establecido.
Aprendemos sobre la confusión en que vivimos una vida desordenada; y a medida que aprendemos surge el orden, que es virtud.
El orden es necesario para no permanecer en la contradicción de hacer una cosa, pensar otra y decir otra.
La mente religiosa debe tener orden en el sentido de rectitud moral y libertad, porque cualquier sistema torna a la mente mecánica y no le da libertad.
No se trata de controlar los pensamientos, sino de comprenderlos, saber su origen.
En la meditación se debe descubrir si uno se puede liberar de todo lo conocido y lograr el completo silencio, porque una mente silenciosa es una mente religiosa y su acción es total, no fragmentada.
En esa quietud, la mente comprende que hay un movimiento diferente, un movimiento de otra dimensión, que no se puede describir con palabras; y significa que no hay miedo, no hay apego ni dependencia, sino una relación en la que no existe separación alguna y un no-tiempo sin mañana, porque la eternidad no tiene tiempo.
Descubrimos que una mente libre de conflictos y de condicionamientos, que puede estar en silencio, es más que una experiencia religiosa es algo sagrado, la religiosidad misma.


el hombre religioso


EL HOMBRE ES RELIGIOSO

Los seres humanos somos naturalmente religiosos por el simple hecho de que siempre estamos en búsqueda racional de las explicaciones respecto a la naturaleza, universo y creación de los seres vivos,existe en nuestras mentes y conocimientos una cierta conciencia de origen, así como la de nuestro destino final. Esto no es nuevo ya que desde civilizaciones antiguas las personas sienten la inquietudde tener a un dios o alguna divinidad o ser supremo, a quien puedan rendir culto y a quien puedan tomar sentido a sus vidas.
El hombre puede partir ya sea de un creador o de la ciencia y generación espontánea; sin embargo desde mi punto de vista creo que la respuesta más clara es un creador, en el caso de los católicos… Dios; esto está comprobado en la palabra de Dios, escrita en la Sagrada Biblia, la cual fue escrita por los discípulos elegidos por Jesucristo y por la revelación en la cual se da a conocer la verdad comunicada por Dios, a través de medios que se encuentran más allá del comportamiento ordinario de la naturaleza.
Es tanta la grandeza de Dios que al hombre no le es posible entenderla, es por eso que busca la manera de alabarlo, adorarlo y comprenderlo. Dios por su parte intenta mandar señales o revelar la verdad por medio de las revelaciones, lo cual como ya anteriormente expliqué.
La religión como tal es parte de la cultura de los pueblos, ya que estos mismos elementos se encuentran unidos, algunos ejemplos son: la arquitectura, la música, el arte, etc.
Como conclusión puedo afirmar que el hombre es religioso por naturaleza ya que lo contrario nuestra vida no tendría sentido y no hay mejor satisfacción que saber que una vez que mueras te estará esperando ese ser supremo al que entregaste tu vida y te salvará.